Los trabajadores del TIB hacen huelga desde hoy tras el fracaso de las negociaciones
Los conductores también harán paros de 24 horas lunes y miércoles y, si el viernes de la próxima semana todavía no hay acuerdo, empezarán una huelga indefinida

PalmaCerca de un millar de trabajadores del TIB de Mallorca, Menorca e Ibiza irán a la huelga a partir de este viernes, después de que hayan fracasado las negociaciones con las empresas concesionarias del servicio público de transporte. Según recoge Europa Press, el inicio de las movilizaciones se confirmó una vez finalizado sin éxito la reunión que este jueves se llevó a cabo en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de las Islas Baleares (TAMIB). De esta manera, los conductores de los autobuses del TIB realizarán paros de 24 horas durante este viernes y lunes y miércoles de la próxima semana. Si llegan al próximo viernes sin acuerdo, empezarán una huelga indefinida.
Se han decretado unos servicios mínimos del 60% y los horarios modificados ya se han publicado en la página web del TIB. De todas formas, el representante del sindicato SATI Juan Rodríguez auguró un "seguimiento masivo" por parte de los trabajadores. El sindicalista lamentó que haya sido imposible acercar posiciones con las empresas, que mantuvieron una actitud como si las movilizaciones "no fueran cosa suya".
Así, prácticamente descartando un "milagro de última hora" que pueda desactivar los paros, consideró que la única manera de solucionar el problema sería la intervención del Gobierno.
Por su parte, la gerente de la Federación Balear de Transportes (FEBT), Petra Mut, ha lamentado la imposibilidad de alcanzar un acuerdo, dado que los posicionamientos entre ambas partes, pese a los cerca de ocho meses de negociación, siguen muy alejados. Prueba de ello, ha señalado, es que mientras que los trabajadores pretendían conseguir un incremento salarial del 30% en un año, las empresas han puesto sobre la mesa un 3%.
Mut ha negado que la decena de empresas concesionarias no quieran "dignificar la profesión" y ha argumentado que, dado que las condiciones están sujetas a unas licitaciones públicas –que finalizarán en 2030–, el margen de maniobra es relativamente escaso.