Vox torpedea la limitación de coches en Mallorca del PP: "Ningún español debe pagar una tasa para entrar en la isla"
Llorenç Galmés intenta conseguir el apoyo de la izquierda para enviar al Parlament una proposición de ley como la que ya tienen las Pitiusas


PalmaAunque los planes del presidente del Consell, Llorenç Galmés, eran tener aprobada este otoño la proposición de ley para intentar controlar la afluencia de vehículos a Mallorca y enviarla al Parlament, el texto todavía no dispone de suficiente apoyo político en el Consell de Mallorca. El partido que más se opone es Vox, hasta el punto de que de momento hace impensable que el PP pueda contar con sus votos. "No podemos aceptar en modo alguno que se ponga una tasa a los ciudadanos españoles para entrar con su coche en Mallorca. Ningún español debe pagar una tasa para entrar en la isla", ha explicado el portavoz de la formación a la institución insular, Toni Gili, en el ARA Baleares.
Galmés contaba con aprobar la norma para Parlamento a principios de 2026 para poderla implantar el próximo año, pero esta temporalización no está clara porque Vox no facilita la aprobación del texto y la izquierda no acaba de "ponerse a tiro", según varias fuentes conocedoras de las negociaciones.
La base de la propuesta de la Dirección Insular de Carreteras –responsable del texto– es la imposición de una tasa disuasiva para vehículos no residentes, como ya han implantado Eivissa (2025) y Formentera (2019). Los residentes, servicios esenciales, transporte de mercancías y vehículos oficiales quedarían exentos, pero Vox quiere que se excluyan a todos los vehículos de ciudadanos españoles. "No aceptamos que haya españoles de primera y segunda" ha dicho Gili.
Los servicios jurídicos del Consejo son conscientes de que este posicionamiento político no encaja con el ordenamiento jurídico europeo, que establece la libre circulación de personas y mercancías entre estados miembros. De esta forma, sólo se pueden poner tasas si se trata de forma igualitaria a todos los ciudadanos de la UE. "Somos conscientes de que, como ocurrió con el tren de Sóller, si se pone una restricción distinta a los españoles del resto de europeos, la justicia lo tumbaría. Nosotros no hemos propuesto esta fórmula. Es el equipo de gobierno quien debe encontrar una propuesta que no vaya en contra de nuestros principios", ha sentenciado Gili.
Negociaciones discretas
Este verano ha habido negociaciones discretas entre el PP del Consell y los partidos de la izquierda, que resultan imprescindibles, ya que Vox no parece dispuesto a cambiar de opinión. "El Pi se ha manifestado a favor, pero no basta. Necesitamos que se impliquen los partidos de la izquierda", ha explicado una fuente del Consell. En esta misma línea, fuentes cercanas a la negociación admitieron que "de momento no se pudo concretar el apoyo ni del PSIB ni de MÉS por Mallorca".
En el caso de la formación ecosoberanista, sus portavoces han manifestado en varias ocasiones que son necesarias "medidas valientes y reales" y han condicionado su voto a la retirada del recurso sobre el BUS-VAO y activar el traspaso competencial.
A la hora de reclamar la implicación de la izquierda, el PP argumenta que "hay una mayoría social que pide reducir la presión de los vehículos". "En el caso de la proposición que llegó del Consell de Ibiza, que era muy parecido, el PSIB y MÉS por Mallorca votaron a favor en el Parlament, lo que hizo posible su aprobación", han recordado.
Techo de vehículos
La propuesta del PP parte de un estudio de carga que fija un máximo de entre 834.263 y 863.061 vehículos. Esto significa que sobran entre 93.000 y 122.000 coches frente a los que circulan actualmente en Mallorca. El borrador del texto que Galmés entregó a los partidos de la institución insular explica que el pleno del Consell decidirá cada año cuál es el máximo techo de vehículos que pueden circular en la isla, siempre según un informe técnico. Además, los coches que entren en la isla por mar necesitarán autorización previa del Consell, vinculada al pago de la tasa.
Eivissa tiene la ley aprobada
El Consell de Eivissa impulsó una proposición de ley para controlar la afluencia de vehículos en la isla durante la temporada alta y la remitió al Parlamento el 13 de mayo de 2024. El Pleno del 29 de octubre de 2024 aprobó definitivamente su texto. La norma se publicó como Ley 5/2024, de 11 de noviembre, y habilita al Consejo para fijar una cuota de vehículos, exenciones y un régimen sancionador.
Para el verano de 2025, el Consell ha marcado una cuota máxima de 20.168 vehículos no residentes al día (excluidos los residentes), del 1 de junio al 30 de septiembre. El reparto incluye 16.000 leva a caro, 4.048 turismos de visitantes y 120 para residentes de Formentera que accedan con vehículo. Se prevé una tasa diaria y un registro y autorización previos para entrar y circular.
Por su parte, Formentera aplica la regulación del acceso de vehículos rodados desde 2019, ya que a finales de 2018 aprobó la Ley de transporte terrestre y movilidad sostenible, que daba cobertura legal al Consell de Formentera para limitar la entrada, la circulación y el estacionamiento de vehículos en el. Desde entonces, cada temporada alta (del 1 de junio al 30 de septiembre) se establece un máximo de vehículos y un sistema de tasa y autorización previa. Los residentes de Formentera pueden circular libremente, pero los visitantes y residentes de otras islas o de la Península necesitan autorización y deben pagar una tasa diaria.