El PP pide la dimisión del delegado del gobierno español por su gestión de la migración: "Cada vez que abre la boca florece el negocio de las mafias"

PalmaEl PP ha pedido este jueves la dimisión del delegado del gobierno español en las Islas Baleares, Alfonso Rodríguez, al considerar que "incentiva" la migración. Así lo ha expresado el diputado y portavoz adjunto del grupo del PP en el Congreso de los Diputados, José Vicente Marí Bosó, después de que se haya confirmado que más de medio millar de migrantes hayan llegado a las Islas Baleares a lo largo de esta semana. "Cada vez que abre la boca, sube el negocio de las mafias", ha dicho.

El diputado considera que las declaraciones de Rodríguez, por haber dicho en La Ser que la llegada de pateras es de las "más intensas" que ha habido en poco tiempo, que se espera que sigan llegando migrantes, y haber negado la existencia de una ruta migratoria entre Argelia y Baleares, además de insistir en que se trata de una ruta por el Mediterráneo. "No ha hecho nada durante estos años y ahora se dedica a las declaraciones, y cada vez que abre la boca florece aún más el negocio de las mafias", ha criticado Marí Bosó: "Lo que ha hecho estos días es incentivar el tráfico de pateras en nuestras costas y exigimos la inmediata dimisión de un señor que se dedica a incendiarlo todo".

El diputado hizo estas declaraciones ante la estación Marítima número 3 del puerto de Palma, que se abrió el pasado martes para acoger a migrantes que esperan el barco para viajar hacia la Península. Hasta ahora, se quedaban durmiendo en la calle a pesar del calor. Según Marí Bosó, "la única actuación estelar" de Rodríguez en materia migratoria ha sido "llenar de barracones los puertos de Baleares". También ha recriminado a Rodríguez su negativa a comparecer en el Parlament y el Congreso ya reunirse con el Govern y los cuatro consejos insulares de las Islas.

Para el diputado, es necesaria "una lucha decidida y sin contemplaciones contra las mafias que trafican con personas en el Mediterráneo", una mayor dotación de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, una política exterior "que no agrave Argelia", la instalación de un sistema de vigilancia en la mayoría de la Europea para que despliegue agentes de Frontex en las Islas.