El balance escaso del programa de alquiler seguro del Gobierno: 27 viviendas en ocho meses
En Mallorca se han firmado 25; en Menorca, 2, y hacia Eivissa y Formentera


Palma"Con este programa queremos romper la barrera que detiene muchos propietarios de pisos vacíos que, como nos dicen los agentes de la propiedad inmobiliaria, prefieren tener la vivienda vacía por miedo a impagos, desperfectos o malas experiencias". Así hablaba la presidenta del Gobierno, Marga Prohens, el 21 de octubre de 2024, cuando presentó una de las medidas estrella del Ejecutivo en materia de vivienda: el programa alquiler seguro. Pese a que la captación de pisos se inició en noviembre, los resultados hoy en día no denotan que haya "muchos propietarios" en las circunstancias que detalló Prohens: después de ocho meses de actividad del programa, la iniciativa sólo tiene 27 pisos, 25 en Mallorca, 2 en Menorca y hacia Ibiza y Formentera.
Estas son las cifras que aporta el Govern a una serie de preguntas del portavoz de Més por Menorca, Josep Castells, y que publicó el Boletín Oficial del Parlament (BOPIB) el 1 de agosto. Curiosamente, las ocho preguntas de Castells reciben prácticamente la misma respuesta, con un texto idéntico en el que sólo cambia el nombre de la isla y el número de pisos ("En el marco del programa alquiler seguro se han firmado x contratos en xx. Como ya anunciado en varias ocasiones el consejero José Luis Mateo, los contratos empezaron a firmarse hace dos meses. El programa alquiler seguro ya dispone de 27 viviendas, la gran mayoría de las cuales son de tres habitaciones": esta es la fórmula que la Conselleria de Vivienda emplea en las ocho respuestas). Además, el Govern se muestra positivo y afirma que el programa "ya dispone de 27 viviendas", la mayoría "de tres habitaciones", unos pisos que suponen una cifra irrisoria si se compara Ibavi la lista de espera para una vivienda social es prácticamente de 8.000 personas, muchas de las cuales representan una unidad familiar con niños.
Según manifestaba el Gobierno en la nota de la presentación del programa (del 21 de octubre), el objetivo era "alcanzar entre 2.000 y 3.000 viviendas en una primera fase". "Se espera que las primeras viviendas se puedan entregar este mismo año", continúa el comunicado. Pese a que no se señalaba ningún plazo de esa 'primera fase', el balance queda lejos de lo anunciado. Aún así, el conseller de Vivienda, Territorio y Movilidad, José Luis Mateo, ha hablado en todo momento de "buen balance" de resultados y ha remarcado que se trata de una iniciativa que "da mucho trabajo" al Gobierno.
El baile de cifras ha sido una constante desde que se puso en marcha el programa. Mateo aseguró en el Parlamento en febrero que había 150 viviendas en "proceso avanzado de adhesión al programa". Tres meses después, en mayo, había 94 en la fase final para firmar los contratos, aunque también aseguró que había más de 400 pisos de propietarios interesados en el programa.
Críticas de oposición y sindicatos
La oposición y los sindicatos han criticado los resultados magros del programa alquiler seguro. El portavoz del PSIB, Iago Negueruela, ha dudado de la eficacia de la iniciativa porque, "cuando finaliza un contrato, todo el mundo quiere subir más de un 100% el precio del alquiler anterior". Mientras que ceder un piso a este programa implica un precio máximo de 1.050 euros en Mallorca y de 1.470 en Eivissa y Formentera. Si un piso se tasa por 1.200 euros al mes, el inquilino pagará al Govern 890 euros; si se tasa en 1.000, el alquiler será de 700; y, si se tasa en 850, el inquilino pagará 595 euros. El precio se actualizará al igual que en el mercado convencional. Unas ganancias que están muy por debajo de las que el alquiler turístico está generando en buena parte de las viviendas que alojan visitantes.
El portavoz de Més por Menorca, Josep Castells, ha lamentado que el programa "sólo guste a promotores y agentes de la propiedad". Más por Menorca también denunció que, después de que el Govern delegara la gestión del programa en el Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria, este órgano designara a la empresa privada Portal Balear Inmobiliario SL para recoger datos personales de los inquilinos que se quieren inscribir, en perjuicio de su privacidad.
Según MÉS por Mallorca, el programa "institucionaliza la especulación inmobiliaria". "Quien teme es quien alquila y no puede pagar el alquiler, no quien especula en la vivienda", manifestó Ferran Rosa en el Parlament para criticar que, en lugar de bajar los precios, el Gobierno decidiera subvencionar parte del precio de mercado, que beneficia a los propietarios. Por su parte, UGT alertó de la posibilidad de que el alquiler seguro tenga un efecto pernicioso y sirva para subir los precios del alquiler. El sindicato reclamaba en octubre que se diera un plazo de seis meses para comprobar la evolución del alquiler. Ahora bien, ocho meses después, la incidencia del programa es casi inexistente.