Apaema denuncia el preocupante aumento de especies invasoras
Los productores ecológicos lamentan que ser una isla debería ser un factor favorable al aislamiento de las plagas, pero "no es así".

PalmaLa Asociación de Producción Agraria Ecológica de Mallorca (Apaema) denunció la "preocupante" situación que vive la isla ante la entrada y expansión de nuevas plagas y especies invasoras, muchas de las cuales ponen en riesgo la actividad agraria, la biodiversidad y equilibrio de los agroecosistemas.
La organización ha explicado en una nota que la más visible y mediática de todas estas problemáticas son las serpientes invasoras, que ya han colonizado amplias zonas de la isla y han desbordado por completo las posibilidades de control del Consorcio para la Recuperación de la Fauna de Baleares (Cofib). "Su presencia genera alarma entre la población por la animadversión que causan, así como por el riesgo que suponen para la fauna autóctona", sostienen desde la asociación con sede en Porreres, quien advierte de que las serpientes son solo la punta del iceberg.
De acuerdo con esta entidad, el problema es mucho más profundo y sistémico, ya que en la última década han entrado una gran cantidad de nuevas plagas en Mallorca y están afectando a cultivos agrícolas y ganadería, en algunos casos de forma muy impactante. Apaema aseveró que ser una isla debería ser un factor favorable al aislamiento de las plagas, pero "no es así". La asociación recordó que no existe otra isla mediterránea en la que se esté dando esta situación y precisó que las razones tienen que ver con la gran presión humana en el territorio, el cambio climático y unos controles fronterizos e internos que "parecen ser absolutamente insuficientes".
Más recursos humanos y económicos
Por eso, Apaema ha pedido a las administraciones un refuerzo de entidades como el Cofib y la UIB, con recursos humanos y económicos suficientes para atender esta nueva realidad, así como una mejora de los protocolos de control en puertos y aeropuertos, especialmente en lo que se refiere a plantas, suelos, animales y materiales biológicos.
La organización también ha abogado por constituir una mesa de seguimiento específica dentro de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio natural, con participación del sector agrario, científico y ambientalista, para monitorizar la evolución de estas especies y planificar medidas conjuntas.