Movilidad

Trenes llenos y vagones sin aire para llegar al Much

Uno de los trenes ha estado más de 20 minutos parado en la estación Intermodal con puertas y ventanas cerradas, lleno hasta los topes, y sin aire acondicionado

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PalmaEl trayecto hacia el Much de Sineu se ha convertido este lunes en una experiencia sofocante para muchos viajeros. Tanto los asistentes a la fiesta como los usuarios habituales del tren han experimentado la masificación de un medio de transporte público que este verano no sólo ha reducido los servicios especiales para esta neofiesta, sino que las frecuencias habituales están mermadas de manera considerable y tienen horario de fin de semana (con excepciones). La situación ha provocado quejas por la masificación y el calor con andenes saturados y pasajeros entrando casi a presión.

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En declaraciones al ARA Baleares, un usuario ha explicado que han sido detenidos unos 20-25 minutos en la estación Intermodal dentro del tren, lleno hasta los topes, "con ventanas y puertas cerradas y sin aire acondicionado", hasta que ha venido un revisor con una llave y ha empezado a abrir las ventanas. "Finalmente, hemos cambiado de tren porque a éste no funcionaba el aire acondicionado", ha dicho.

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Este colapso ha coincidido con la reducción de servicios especiales que habitualmente ponía en marcha SFM para facilitar la llegada al Much de Sineu, suprimidos este año por las obras en la estación de Verge de Lluc, que limitan la capacidad de la red.

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A esto se suma que, desde el 5 al 17 de agosto, todos los trenes circulan con horarios de fin de semana y sólo con refuerzo a primera hora de la mañana, una medida que también ha afectado al resto de usuarios diarios.

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La situación experimentada este lunes por muchos jóvenes camino a Sineu, con pasajeros pegándose codazos y entrando en betzef en el vagón, se añade a la masificación diaria de los servicios a primera hora y última hora que se vive desde primero de agosto, hace 11 días, en los trenes del SFM. En la valoración del primer día de horarios, la asociación de usuarios del tren de Mallorca fue contundente: "La situación es peor que nunca".