Los menores migrantes, arma política en medio del fuego cruzado entre Prohens y Sánchez
El rechazo del Gobierno a recibir a 49 niños y adolescentes provenientes del reparto de los llegados a Canarias tensa las relaciones con la Moncloa. Los especialistas advierten que la crisis migratoria no ha hecho más que empezar y exigen soluciones


PalmaEl reparto de menores migrantes no acompañados se ha convertido en las últimas semanas en un arma arrojadiza en el fuego cruzado entre el gobierno español y el PP. En este caso, fue la presidenta del Gobierno, Marga Prohens, quien se erigió en la primera espada de la mayoría de los barones populares que hicieron frente común contra Pedro Sánchez, en un nuevo episodio de tensión entre administraciones autonómicas del PP y del Estado. El pasado viernes, el Ejecutivo anunció la presentación de un segundo recurso contra la medida, que pretende descargar a las Islas Canarias, desbordadas por la ola migratoria. Mientras, cerca de 3.900 menores llegados a ese territorio en patera esperan una solución a su situación. En las Islas corresponderían 49, una cifra que ni el PP balear ni su socio, Vox, están dispuestos a asumir.
El debate político llega forzado por el gobierno canario ante la magnitud de la crisis migratoria en sus costas. Ya hace más de un año que el tira y afloja entre instituciones se mantiene, pero no ha sido hasta agosto, cuando finalmente se ha aprobado el Real Decreto que concreta cómo hacer el reparto, que la tensión ha aumentado de nivel. En las Islas, el cálculo del Estado fija una capacidad de acogida ordinaria de 406 menores. Si se triplicase esta cifra (1.218 menores acogidos), el Gobierno podría pedir que se declarase la situación de contingencia migratoria en el territorio.
¿Cuál es la situación actual? Según el Ejecutivo autonómico, actualmente sólo hay 72 plazas específicas creadas, si bien Baleares acoge a más de 680 menores debido al incremento de pateras llegadas a través de Argelia del último año. Éste es el principal argumento que utiliza el Gobierno de Prohens para rechazar la asignación del Estado.
El PP cuestiona el mecanismo
Por ese motivo, el Gobierno de Prohens se ha plantado. "Vamos a utilizar todas las vías que nos permite el estado de derecho para defender los intereses de los ciudadanos de las Islas Baleares", advirtió el vicepresidente primero, Antoni Costa. Aunque el secretario de Estado de Infancia y Juventud, Rubén Pérez, ha abierto esta semana en La Ser la posibilidad de recalcular el reparto según la capacidad de las Islas, el choque frontal entre administraciones ha sido la tónica general del debate en las últimas semanas. El PP cuestiona el mecanismo legal del Real Decreto, mientras que el Ministerio de Inclusión ha acusado a la administración balear de no facilitar correctamente los datos sobre menores no acompañados que se le requirieron el pasado mes de diciembre. Prohens consideró que el gobierno español la "amenazó" por advertir a las comunidades que están obligadas a cumplir con la ley o intervendrán "las fuerzas de seguridad". El Ejecutivo también reprochó al presidente español, Pedro Sánchez, que haya eximido al País Vasco y Catalunya del reparto –necesitaba los votos del PNV y Junts para sacar adelante la norma.
El Gobierno lleva tiempo reclamando además que el Estado reconozca la ruta de Argelia. De hecho, para negarse a recibir a los menores argumentó que la tendencia de llegadas de pateras a las Islas es creciente, mientras que en Canarias la cifra va a la baja. Según el último balance publicado por el Ministerio de Interior, hasta mediados de agosto llegaron 4.323 inmigrantes a las Islas, 1.880 más que en 2024.
La comparación indignó al presidente canario, Fernando Clavijo, quien el pasado lunes advirtió en una entrevista en UD Radio de que la situación en las Islas "de ninguna manera es comparable a Canarias". "Formamos parte de un Estado, y la solidaridad debe distribuirse entre todas las comunidades", dijo, y respondió a Prohens que "eso no es 'yo puedo o no puedo'". "A nosotros nadie nos pide, el niño llega y lo dejan en la punta del muelle, y tienes que atenderlo a toda costa, porque tienes una obligación derivada del derecho internacional", insistió.
¿Qué situación tienen ahora mismo las Islas Canarias? En 2024 llegaron 46.843 inmigrantes en pateras a sus costas, un récord histórico, y en lo que va de 2025 han llegado 11.575. Sin embargo, la ruta canaria está abierta desde 1994 y acumula 200.000 llegadas, según datos de Salvamento Marítimo, aunque esta cifra no incluye los miles de muertos y desaparecidos en las aguas. "En Canarias tenemos una gran experiencia con las pateras", explica el magistrado de la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria y antiguo juez del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) en Gran Canaria, Arcadio Díaz. "La primera llegó el 21 de agosto de 1989 a Fuerteventura. Eran dos chicos que enarbolaban una bandera del Frente Polisario", rememora. Desde entonces, expone, "el fenómeno se intensifica en función de cómo está el océano, el ramadán, que haya más o menos presión en Gibraltar: los traficantes están pendientes de la situación y salen de un sitio u otro con un tipo de embarcación u otro, un precio u otro". Sin embargo, advierte que "por mucho que se haga, la presión de millones de seres humanos que huyen del hambre, la desertización y la guerra seguirá existiendo".
Guerra contra la delegación del gobierno
Pese a las críticas de Clavijo, Prohens ha evitado enfrentarse a ella directamente. En la última semana, el PP se ha centrado en criticar la actuación del delegado del gobierno español, Alfonso Rodríguez, quien a lo largo del mes de agosto ha gestionado la ampliación de los recursos de primera atención a los inmigrantes frente al pico de personas -1.243- que ha llegado a Baleares. Además, la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) ha instalado carpas en el puerto de Eivissa y Palma para atender en mejores condiciones a los afectados, que dormían al raso. Todo ello, en medio de las críticas de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), que acusó de carencia de medios y deficiencias en los protocolos de actuación de Salvamento Marítimo con los migrantes. El PP –con el apoyo de unos cuarenta ayuntamientos– ha exigido, además, la dimisión de Rodríguez por la "nefasta gestión de la crisis migratoria". El delegado del gobierno español, por su parte, ha mantenido un perfil bajo en los medios. Sin embargo, el pasado miércoles pidió a Prohens "cooperación" con el gobierno de España y no "confrontación".
"Es cierto que la situación en Baleares está congestionada", expone el presidente de la Federación de Entidades de Atención a la Infancia y la Adolescencia Balear (FEIAB), Joan Ferrer. "Llevamos más de dos años pediendo a la dirección general de Familias, Infancia, Juventud y Diversidad más recursos para estas personas", añade: "No ha habido una planificación para dar respuesta a la necesidad del número de personas que llega". Por otra parte, denuncia la "lucha política entre el gobierno del Estado y el balear". "Se utiliza la situación de vulnerabilidad de estas personas, no es ético".
La experta en derecho internacional público y profesora del Observatorio de migraciones del Mediterráneo, Margalida Capellà, reclama "coordinación interinstitucional basada en la lealtad y la eficacia". "La imagen que se da es que parece que todo el mundo hace mucho, pero no se resuelve el problema", considera. Y advierte que el discurso del PP, "aunque mantenga que es para atender bien a estos niños, es antiinmigración, y desde fuera parece que no los quieren". "Las administraciones pudieron dar una respuesta más rápida cuando se acogieron a los refugiados ucranianos", recuerda.
Vox, desaparecido en combate
"Vemos a un PP más radicalizado que nunca, estigmatizando y criminalizando a los inmigrantes", denuncia el diputado del PSIB Omar Lamin. "Cuando hay un reto de país, da la espalda", dice. En el mismo sentido, la diputada canaria del PSOE en el Congreso, Ada Santana, advierte que Baleares, que ahora rechaza su reparto, podría encontrarse en la misma situación en pocos meses. "¿No pedirán ayuda al Estado?", cuestiona.
En medio del fuego cruzado, destaca el poco protagonismo de Vox, que en el último mes se ha limitado a pronunciarse sobre la problemática en las redes sociales, aunque había exigido el rechazo a los menores migrantes en el PP a cambio de los presupuestos. "El Gobierno ya defiende nuestra postura", afirma una fuente del partido. "Supongo que quieren captar a un votante de Vox", apunta. En cambio, fuentes del Govern consideran que la posición de Prohens "representa una mayoría muy amplia y transversal de la ciudadanía".u