El Plan impulsa su patrimonio con la compra de los Rincones de Llubí y la cueva del Buitre de Petra
Estas dos adquisiciones se suman a la compra de la cueva del Camp del Obispo por parte del Ayuntamiento de Sencelles
LlubíLos municipios de Llubí y Petra han dado un paso importante en la protección y apertura controlada al público de su patrimonio prehistórico y natural con la compra de los Racons y de la cueva del Buitre, respectivamente.
Con el apoyo del Consell de Mallorca y las inversiones municipales correspondientes, se han adquirido recientemente dos parcelas de alto interés patrimonial y se iniciará una labor de recuperación, accesibilidad y gestión.
De hecho, aparte de poder llevar a cabo el mantenimiento, uno de los aspectos más importantes es poder gestionar el acceso y consecuentemente mantener los espacios en óptimas condiciones.
Estas dos adquisiciones se suman a la compra de la cueva del Camp del Obispo por parte del Ayuntamiento de Sencelles, como publicó este digital recientemente. Es un importante yacimiento arqueológico del municipio. La adquisición ha sido por un importe de 36.000 euros, financiados con una subvención del Consell de Mallorca.
Llubí
En Llubí, la alcaldesa, Magdalena Perelló, ha explicado que la compra se ha hecho en varias fases: "El pasado mes de febrero, con la primera subvención, adquirimos dos parcelas -una al lado del talayot número 1 y otra donde hay un muro talayótico. Posteriormente y con dinero del Ayuntamiento compramos la parcela de 2'.
En total, la compra ha supuesto 75.000 euros del Consell de Mallorca y 30.000 euros del Ayuntamiento de Llubí. Consejo de Mallorca en su red patrimonial.
Petra
En cuanto a Petra, el Consistorio ha adquirido la cueva del Buitre o de Son Montserrat por un total de 100.000 euros, 90.000 de los cuales provienen del Consell de Mallorca y 10.000, del Ayuntamiento. Es un yacimiento arqueológico declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento.
El alcalde, Salvador Femenias, ha explicado que el próximo objetivo es mejorar el acceso y ordenar las visitas: "Pediremos al Consell de Mallorca que nos ayude a hacer un camino en condiciones ya marcar la ruta para que se pueda ir sólo por allí donde es de propiedad pública y no privada".
Femenias ha añadido que también se prevé limpiar la zona, cambiar las barreras, colocar señalética y, posiblemente, fijar un horario de apertura y cierre.
"Ahora mismo la gente no sabe por dónde debe ir, bota paredes y deja estiércol. La ruta que queremos abrir está llena de vegetación y casi es intransitable. Hay que hacer bien, y eso no se hará en dos días", ha remarcado el alcalde.
Los Rincones
Els Racons es uno de los yacimientos talayóticos más destacados del término de Llubí. Este conjunto arqueológico se encuentra en un entorno rural cercano al pueblo y conserva restos notables de la época talayótica, correspondiente a la primera edad del hierro, dentro de la prehistoria tardía de las Islas Baleares.
Entre los vestigios que se pueden observar, destacan talayotes circulares de grandes dimensiones y muros ciclópeos que atestiguan la existencia de un asentamiento complejo y organizado. Uno de los talayotes mejor conservados llega, según diversas fuentes, cerca de los cinco metros de altura, y presenta un interior con pasillo y aberturas, lo que le convierte en uno de los ejemplares más interesantes de la zona.
El yacimiento ocupa una superficie considerable, rodeada parcialmente de vegetación. Esta situación ha motivado el interés de entidades de conservación y voluntariado, que han impulsado proyectos de limpieza y recuperación para eliminar la vegetación invasiva y hacer valer el espacio. Paralelamente, se ha planteado un proyecto trienal de intervención arqueológica con soporte público, destinado a estudiar, conservar y difundir este patrimonio histórico.
Llubí, además, es un municipio con una riqueza arqueológica notable: se han identificado más de treinta yacimientos que abarcan desde el período pretalayótico hasta épocas posteriores, lo que demuestra la importancia histórica y la continuidad del poblamiento a lo largo de los siglos.
La cueva del Buitre
La cueva del Buitre, también conocida como cueva de Son Montserrat o cueva de los Buitres. Se trata de una cavidad de origen natural y artificial, con características talayóticas, que presenta un interior estructurado en tres naves separadas por pilares excavados en la roca.
A lo largo del tiempo, la cueva ha tenido usos muy diversos. Además de su valor como espacio prehistórico, se ha empleado como refugio de pasto y ganadería, e incluso como cantera de piedra arenisca, aprovechando la calidad de la piedra local para la construcción tradicional. Esta combinación de usos históricos y naturales ha contribuido a mantener su relevancia en el paisaje cultural de la comarca.
El entorno de la cueva, situado en el valle de la Valleta de Petra, tiene un alto valor paisajístico y patrimonial. En la zona se encuentran la fuente de n'Orenga, antiguos caminos y senderos tradicionales, así como relieves naturales que configuran un espacio de interés tanto arqueológico como turístico.
Para reforzar la protección del yacimiento, el Consell Insular de Mallorca incoó en 2009 un expediente de delimitación del entorno de protección del monumento, lo que asegura su preservación de los valores históricos y paisajísticos dentro del marco legal vigente.