El fiscal superior de Baleares da el salto a Madrid: Julio Cano será el jefe de la Secretaría Técnica de la Fiscalía General del Estado
La nueva fiscal general, Teresa Peramato, arranca su mandato con cambios en la cúpula y defiende una Fiscalía más autónoma y cercana a la ciudadanía
PalmaLa nueva fiscal general del Estado, Teresa Peramato, ha anunciado este jueves que Julio Cano, actual fiscal superior de Baleares, será el nuevo responsable de la Secretaría Técnica de la Fiscalía General del Estado (FGE). Cano relevará a Ana García de León al frente de un órgano clave en la estructura interna del ministerio público. Peramato ha destacado "el rigor, la profesionalidad y el respeto que despierta entre la carrera fiscal".
El anuncio se ha realizado durante el acto de toma de posesión de Peramato en el Tribunal Supremo, durante el cual ha pronunciado un discurso marcado por la defensa de la lucha contra la violencia de género y por la necesidad de reforzar la autonomía institucional de la Fiscalía. La nueva fiscal general, referente en esta materia, pidió un "posicionamiento claro y activo" de toda la sociedad ante el acoso sexual y los delitos contra la libertad sexual.
Un discurso centrado en las víctimas y en la modernización del ministerio público
Peramato ha recordado a las 1.340 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas desde 2003, y las 45 víctimas mortales registradas este año. "La Fiscalía debe interpretar la ley con una comprensión profunda de la sociedad a la que sirve", ha remarcado, reivindicando la necesidad de reforzar la protección de víctimas y colectivos vulnerables como niños, ancianos, migrantes o personas con discapacidad.
La nueva fiscal general también ha situado entre sus prioridades el debate pendiente sobre el modelo procesal penal, que propone trasladar la dirección de las investigaciones de los jueces a los fiscales. "Es una apuesta por una justicia más ágil y cercana", ha reivindicado.
Un llamamiento a la unidad y referencias al caso García Ortiz
Sin evitar la crisis abierta por la condena del Tribunal Supremo al exfiscal general Álvaro García Ortiz -inhabilitado por revelación de secretos-, Peramato ha admitido que el caso ha sido "una herida profunda" para la institución. "Debe sanar, y confío en que lo hará con el esfuerzo de todos los fiscales", ha afirmado.
También ha tenido palabras de reconocimiento para todos sus predecesores, y de forma especial para García Ortiz, a quien ha expresado "respeto, admiración y agradecimiento".
Más autonomía y un proyecto colectivo
Peramato ha apelado a una Fiscalía "más independiente", con autonomía presupuestaria, digital y organizativa. Destacó que el cuerpo fiscal -formado por 2.804 profesionales- es "potente y comprometido", y ha reivindicado el papel del Consejo Fiscal y de la Junta de Fiscales de Sala en la toma de decisiones estratégicas.
"Somos una comunidad, no una persona", ha remarcado, y ha defendido que el futuro de la institución debe construirse "escuchando, dialogando y trabajando juntos".
Un final emotivo
En un tramo final marcado por la emoción, Peramato ha recordado a su madre, de 91 años, a la que ha descrito como "una lideresa y una trabajadora infatigable". El discurso, que también incorporó citas de Unamuno y Eleanor Roosevelt, concluyó con un llamamiento a encarar el futuro "con renovación, valentía y la fuerza de los sueños compartidos".