Hace unos días, el PEN Català (que es el nombre en los Países Catalanes del PEN Club internacional, la entidad que reúne a escritores de todo el mundo) concedió a Palma, en el local la Colectiva, el premio Ve Libre a Tahir Hamut Izgil, uno de los principales autores de nuestros días en lengua uigur, una lengua hablada por siete millones de personas en la Región Autónoma de Xingjian, en el oeste de China. El premio Veu Lliure se concede desde hace quince años a un escritor o escritora de todo el mundo que haya destacado por la defensa de los derechos y libertades de las personas y los pueblos. Tahir Izgil reúne con creces, y con una dosis de sufrimiento personal que no debería existir, las características para ser merecedor de ese galardón.

Tahir Izgil es cineasta y como escritor es conocido sobre todo por su poesía, aunque el libro suyo que tenemos disponible en catalán es en prosa: Cuando vengan a arrestarme a medianoche –traducido por Marc Barrobès y publicado por Empúries– es el relato impactante del genocidio perpetrado por China contra el pueblo uigur y de la terrible persecución política que sufrieron el autor y su familia –como también la mayoría de escritores, artistas e intelectuales de la nación uigur– en los últimos años, sobre todo del año10. Tahir Izgil logró huir del infierno y exiliarse a EEUU, donde vive actualmente sin salir, porque se arriesgaría a no poder volver. El premio Ve Lliure, lo tuvo que aceptar y agradecer por vía telemática.

Cargando
No hay anuncios

El relato de Tahir Izgil es el de un asedio, un círculo que se va estrechando paulatinamente alrededor de cada una de las personas que forman parte de una comunidad, en este caso la uigur, hasta ahogarlas literalmente. Voces silenciadas, pasaportes incautados, control de datos biométricos y ADN, y después ya un horror de campos de internamiento, en los que han desaparecido en pocos años más de un millón de personas. Las libertades perdidas, las coacciones y las humillaciones son al principio un goteo desagradable, temible, pero lo que viene a continuación es ya un salto al vacío hacia el horror de las dictaduras y los regímenes autoritarios.

Puede parecer que las coordenadas políticas y culturales del conflicto entre los uigures y China de Xi Jinping nos sean lejanas, pero no es así. El horror que explica Tahir Izgil no difiere esencialmente de los grandes relatos de personajes del siglo XX que sufrieron el fascismo, como Stefan Zweig, Primo Levi y Władysław Szpilman, entre otros. Si leemos los libros de estos autores como avisos contra el peligro de la extrema derecha y el fascismo que nos llegan de un pasado reciente (el siglo XX, en términos históricos, no es ayer; es hoy por la mañana), el libro de Tahir Hamut Izgil es aún más urgente, más perentorio, porque es de hoy mismo, de otro tiempo. en un país con un gobierno al que Occidente tampoco se atreve a ponerle ningún empero por sus continuas violaciones de los derechos humanos. Al contrario, todo el mundo en Europa y en América quiere estrechar relaciones con China y Xi Jinping y hacer negocios, obviando cínicamente los horrores que se perpetran.

Cargando
No hay anuncios

Leemos Tahir Hamut Izgil y cojámonoslo como una advertencia. No es una historia exótica ni lejana, es el presente de nuestro mundo globalizado, oscuro y feo, en el que las democracias liberales se encuentran en un peligro real. El hecho de ser un destino turístico acostumbrado a vivir mostrando al mundo una permanente sonrisa postiza no nos libera de formar parte: al contrario, nos expone con más crudeza.