Idoia Ribas pasa al grupo de no adscritos: "Vox es un proyecto dirigido al fracaso"
La diputada confirma que deja al grupo parlamentario de extrema derecha y critica duramente a su antiguo partido
PalmaLa hasta el martes diputada de Vox en el Parlament, Idoia Ribas, ha confirmado este jueves su paso al grupo de diputados no adscritos. En un escrito dirigido a la Mesa de la Cámara a primera hora de la mañana de este jueves, Ribas ha solicitado formalmente su salida del grupo parlamentario de Vox para adquirir la condición de diputada no adscrita. "Mi salida del grupo confirma el hundimiento de un proyecto que, desde el principio de la legislatura, ha estado dirigido al fracaso por las continuas injerencias de la dirección nacional, que intencionadamente ha buscado ese desenlace", ha afirmado. Con su marcha, que suma a Xisco Cardona y Agustí Buades, Vox queda con cinco diputados en el Parlament.
Ribas ha recordado que, a lo largo de la presente legislatura, Vox ha perdido representación en distintos parlamentos autonómicos, diputaciones provinciales, consejos insulares y ayuntamientos de todo el Estado, en una deriva "autodestructiva" que ha atribuido "exclusivamente" al mando único de la dirección nacional. Este mando, a su juicio, lejos de querer avanzar en su agenda política, busca el enfrentamiento con sus representantes electos y entre ellos, con la "intención injusta" de reducir la presencia del partido en las instituciones públicas.
Ribas ha exigido a la dirección de su ya antiguo partido que explique a qué responde esta estrategia, ya que, contrariamente a sus principios fundacionales, "la subsistencia de este partido sigue dependiendo de las aportaciones públicas que recibe, y se trata, por tanto, de una entidad sufragada por todos los contribuyentes".
"Gestión dañina del proyecto de Vox"
"Merecemos una explicación ante la nociva gestión económica, política y humana del proyecto, y ante la ausencia de objetivos constructivos más allá del sostenimiento mismo del partido, para dar cobijo a quienes lo dirigen y para nutrir a entidades privadas afines a éste", ha afirmado.
Para la ya exdiputada de Vox, el "desprecio irracional" hacia las autonomías y el municipalismo por parte de quienes toman las decisiones hace inviable que el proyecto pueda resultar útil gestionar competencias. Según ha indicado, son prueba de ello la salida injustificada de gobiernos autonómicos o la renuncia a formar parte, como en el caso de Baleares.
En su escrito, Ribas ha apelado al ejercicio de sus derechos políticos y al compromiso con los electores, y ha reivindicado la obligación de ejercer su cometido sin someterse a las presiones "de quienes, en la partidocracia, buscan perpetuarse en el poder en beneficio propio, a costa de beneficiarlo propio".
El ex de Vox ha reivindicado su presencia en el Parlamento como "crucial" para los avances conseguidos durante su etapa como portavoz, "aunque tener que enfrentarse a la dirección del partido para hacerlo posible, con el coste político y personal que esto le ha supuesto". "Somos plenamente consciente de que el fin único de la política debe ser siempre servir a los ciudadanos e intentar mejorar sus vidas, y no servir a los dirigentes de los partidos —concluyó—, y eso es lo que seguiré haciendo a partir de ahora desde mi nueva condición de diputada no adscrita".